Simulación de accidente de tráfico para cobrar el seguro: Estafa
La AP Salamanca condena a cuatro miembros de una misma familia como autores de un delito de estafa en grado de tentativa delictiva por simular un accidente de tráfico para intentar cobrar la indemnización del seguro.
Cuatro miembros de una misma familia, de común acuerdo y con el fin de defraudar a una compañía aseguradora, simularon la existencia de un accidente de circulación entre dos vehículos propiedad de uno de ellos.
El día de los hechos, el propietario de ambos vehículos llamó a la grúa de su seguro tras haber sufrido supuestamente el accidente en cuestión. A la llegada del vehículo de arrastre al lugar de los hechos, el operario se encontró con la única presencia de uno de los acusados quien, tras describir la mecánica del accidente, cursó el correspondiente parte de siniestro al seguro.
Recibido el parte y tras haber constatado la existencia de previos accidentes de similares características en los que habían intervenido los mismos sujetos, la compañía seguradora encargó una investigación del siniestro.
Fruto de esa investigación, la aseguradora descubrió una trama de carácter familiar, tendente a la defraudación de la compañía, que se evidenciaba de los siguientes hechos:
- Los daños sufridos por los vehículos no eran compatibles con la forma y modo en que se decía que se había producido el accidente.
- El propietario de ambos vehículos era la misma persona y todas las personas que se decía que iban en los vehículos tenían vínculos familiares entre sí y ya habían sufrido otros accidentes altamente «sospechosos», tanto por las circunstancias como por la coincidencia en los intervinientes.
- El domicilio de uno de los conductores implicados coincidía con el del propietario de los vehículos.
- Las pólizas de ambos vehículos fueron formalizadas por el mismo agente de seguros y contratadas por dos hermanas familia del propietario, quienes supuestamente, además, viajaban como ocupantes de los vehículos en el momento del accidente.
- Tras el siniestro se facilitó, como número de contacto de ambos vehículos, el número de teléfono de la misma persona. Resultado de todo lo anterior, se descubrió el fraude y, en el juicio incoado en méritos de la denuncia formulada por la aseguradora, los acusados llegaron a un acuerdo con el Ministerio Fiscal.
En virtud de dicho acuerdo, el juzgador dictó una sentencia de conformidad por la que se condenó a los acusados a 3 meses de prisión por la comisión de un delito de estafa en grado de tentativa.